El óxido férrico existe en la naturaleza en forma de hematites. Es el principal mineral de hierro para producir metales y sus aleaciones. Además, este óxido existe en el mineral limonita 2Fe2O3 - 3H2O. Una aplicación importante de este compuesto es la producción de pigmentos rojos, naranjas y amarillos. Otras aplicaciones incluyen revestimientos para metales, acero y caucho; en el campo de la cerámica; y como catalizador para reacciones de oxidación.
El óxido férrico se sintetiza y se compone principalmente de óxido de hierro anhidro y/o hidratado. La gama de colores incluye el amarillo, el rojo, el marrón y el negro. La principal diferencia entre el óxido de hierro de calidad alimentaria y el óxido de hierro de calidad industrial es que el nivel de contaminación de otros metales es relativamente bajo. Esto se consigue seleccionando y controlando las fuentes de hierro y/o el grado de purificación química durante el proceso de fabricación. El óxido de hierro se ha utilizado para colorear rellenos y decoraciones en caramelos, productos de pastelería, productos de queso, salsa de pescado, alimentos para mascotas, cosméticos y productos farmacéuticos.